El Corazón de la Navidad
Texto bíblico:
“Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la Ley,
para redimir a los que estaban bajo la Ley, a fin de que recibiéramos la adopción de hijos.
Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: «¡Abba, Padre!»
Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo.
Gálatas 4:4-7.
En este texto bíblico se encuentra una síntesis del corazón de la Navidad. Los cristianos solemos decir «Cristo es la Navidad» y es cierto; si existe esta fecha conmemorativa es porque Jesús nació en Belén de Judea hace ya 2000 años. Es verdad que la influencia pagana en la celebración del nacimiento de Cristo opaca el hecho centrándose en las decoraciones, en los regalos, en los banquetes y en la diversión; pero aún así el mundo sabe que la Navidad conmemora el cumpleaños de Jesús.
El apóstol Pablo explica que hubo un cumplimiento del tiempo, una fecha especial escogida por Dios para que su hijo naciera como un humano, dice nacido de mujer, es decir, María. Es muy importante esto porque la promesa decía: «la virgen concebirá y dará a luz un hijo» (libro del profeta Isaías, capítulo 7, verso 14). El nacimiento virginal es uno de los puntos claves de nuestra fe. Jesús nació de María virgen. Este hecho explica el nacimiento de Jesús como un milagro de Dios. San Mateo aclara que José tomó por esposa a María estando embarazada, pero que no la conoció hasta después del alumbramiento; esto es que no tuvo relaciones sexuales con ella hasta después del nacimiento de Jesús (véase San Mateo 1:24-25). María concibió el niño siendo virgen y dio a luz a su primogénito siendo virgen. A partir de ahí ella cumplió con sus deberes conyugales con su esposo, José, como señalan los evangelios en otros pasajes.
El propósito de la Navidad es la redención de la humanidad caída. Cristo vino a rescatar a todos los que estaban bajo el dominio de Satanás para traerlos de las tinieblas a la luz. Primero Dios nos creó a su imagen y semejanza, luego nos perdió a causa del pecado, pero finalmente nos adoptó y nos hizo hijos suyo por medio de su hijo, Jesús: “porque todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús” (carta de Pablo a los gálatas, capítulo 3, verso 26). Hay que separar bien el papel de María y el papel de Jesús. María fue escogida como canal para la llegada del Salvador al mundo, Jesús fue enviado a través de María para salvar al mundo. María cumplió con su hermoso papel de ser la madre del Hijo de Dios, ahora honramos su memoria y animamos a todas las mujeres del mundo a seguir su ejemplo de mujer consagrada a Dios; pero, Jesús es el salvador del mundo, él fue quien padeció y murió en favor de toda la humanidad. Pongamos atención a esta doctrina: “todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús”.
Ahora que tenemos la posición de hijos, Dios está formando en nosotros el carácter de Jesucristo por medio del Espíritu Santo que ha sido derramado en nuestros corazones. El Espíritu de Cristo nos hace sentir verdaderos hijos de Dios. En nuestra relación con él podemos llamarle «papi». Eso es lo que significa ¡Abba Padre! El sentido de la Navidad es precioso. La llegada de Jesús al mundo nos abrió el camino para conocer al Padre y relacionarnos con él, podemos decir que no somos huérfanos, tenemos un padre que nos ama inmensamente. De la misma manera que nosotros nos sentimos alegres cuando nuestros hijos nos llaman papi o papito, el Padre celestial se siente orgulloso cuando uno de sus hijos le llamamos papito, el reacciona como un padre verdadero y se acerca más a nosotros y nuestra relación con él se profundiza más ¡Qué beneficiosa es la navidad para la humanidad!
La Navidad es liberación. Libertad a través de Cristo. Jesús dijo a los judíos: «conoceréis la verdad y la verdad os hará libres» (evangelio de Juan capítulo 8, verso 31). La verdad que conocemos es que Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores. Ahora somos herederos de Dios por medio de Cristo. Esto significa que cada uno de los hijos de Dios tiene un porvenir maravilloso, por medio de Jesucristo participamos de las promesas que les fueron dadas a Abrahán, nuestro padre espiritual. En el presente tenemos la salvación pero en el futuro nos aguarda la corona de la vida eterna. Esto de la corona significa que la salvación que ya hemos logrado por haber creído en Jesús y recibirlo como nuestro salvador personal, se completará cuando el venga por segunda vez a la tierra. La coronación de alguien tiene lugar cuando se obtiene el triunfo, el triunfo del cristiano es contra la muerte. Por eso reiteramos que el nacimiento de Jesús significa liberación. Esta verdad está implicada en el anuncio de los ángeles a los pastores que guardaban el rebaño la noche del nacimiento:
“Había pastores en la misma región, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño.
Y se les presentó un ángel del Señor y la gloria del Señor los rodeó de resplandor, y tuvieron gran temor.
Pero el ángel les dijo:
No temáis, porque yo os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo:
que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor” (Evangelio de Lucas, capítulo 2:8-11).
La Navidad también nos hace participantes de un reino que es para siempre, el reino de Dios, el cual se está perfeccionando en cada uno de nosotros y se completará en el tiempo del fin. Demos gracias a Dios por esta fecha conmemorativa porque ella contiene el mensaje de la redención por medio de la fe en nuestro Señor Jesucristo. Si tú no tenías esta perspectiva de la navidad, te invito a meditar en lo que Dios ha hecho por ti, enviando a su hijo para sacarte de la esclavitud del pecado y librarte de la condenación eterna por medio del perdón y la purificación de tu alma, a través de su hijo, Jesús. Pero eso sí, para beneficiarte de esta bendición debes abrir tu corazón e invitar a Jesús a entrar en él. Tú puedes orar diciendo: Amado Jesús, cuando tu naciste no hubo lugar para ti en la posada del pueblo, pero hoy yo abro mi corazón para que tú entres y poses en él. Dios les bendiga.
PREGUNTAS PARA AFIRMAR EL ESTUDIO:
¿Qué significa la navidad para ti?
¿Qué es lo más importante para ti en la navidad? ¿dar y recibir regalos o acercarte más a Dios?
¿Cuál es el regalo más importante de la navidad?